Pocas cosas pueden provocar una sensación tan espantosa. Este escenario es digno de cualquier película de terror. Solo imaginarlo mientras escribo hace que quiera salir corriendo a comprobar si mi consola está en perfecto estado.Es fundamental recordar que la consola PlayStation, aunque robusta y confiable, requiere ciertos cuidados básicos para evitar este tipo de sustos. Limpieza regular, ventilación adecuada, y mantenerla lejos del polvo y fuentes de calor directo (que ya la calentamos bastante nosotr@s jugando) son esenciales para su buen funcionamiento.
Si seguimos unas normas sencillas de mantenimiento, nuestra consola PlayStation nos recompensará con muchas más horas de diversión y aventuras inolvidables.
Pero, inevitablemente, habrá momentos en los que tendremos que separarnos de ella. Puede ser por trabajo o porque, lamentablemente, se haya estropeado. Y aquí es donde debemos ser responsables. Si tu consola ha dejado de funcionar, el amor y la paciencia no serán suficientes para repararla.
Si no tienes conocimientos técnicos, no intentes abrirla. Es probable que el resultado sea peor. Mi mejor consejo es acudir a una empresa especializada en reparación que cuente con profesionales capacitados para devolver tu consola PlayStation a la vida.
Así podrás volver a decir con alegría: viernes, tarde, casa, sillón y a disfrutarlo un montón.
Mi recomendación es que busques una empresa de reparación que cuente con profesionales que sean capaces de devolver a tu playstation a la vida y así decir…
Viernes, tarde, casa, sillón y a disfrutarlo un montón