Sobrecalentamiento por exceso de uso.

Cuando nosotros excedemos el tiempo de uso recomendado por el fabricante y la consola se ha sobrecalentado nos saldrá la luz roja y la consola se apagará. Para arreglar esto simplemente lo que tendremos es que dejar nuestra consola apagada 2-3 horas para dar tiempo a los componentes internos y que no puedan dañarse por el sobrecalentamiento. Es recomendable no exceder el tiempo de uso recomendado por el fabricante. Aunque tu toques la consola y te parezca que este fría puede haber componentes en sobrecalentamiento y no te des cuenta.

Obstrucción de la refrigeración.

Otra de las ocasiones por la que puede surgir la luz roja es que los filtros de la consola estén saturados, obstruyendo la ventilación. Esta avería provoca que el ventilador de la consola aumente de revoluciones haciendo que suene más al no poder refrigerar correctamente. Para solucionar este error lo que tendremos que hacer será abrir nuestra consola. Una vez abierta podremos limpiarla correctamente de toda la suciedad que se va ir acumulando por el uso y el tiempo. Para limpiar correctamente nuestra consola recomendamos un espray de aire comprimido que es idóneo para alcanzar los peores recovecos que pueda tener y limpiarlos adecuadamente. También podremos usar un aspirador para remover la mayor cantidad posible cuando se trata de grandes cantidades y usar una brocha a modo de cepillo para limpiar los componentes.

Componente averiado o defectuoso.

Este problema también puede ser producido porque directamente tengamos un componente en mal estado dentro de nuestra consola. Si vemos que el problema de la luz roja persiste, tendremos que hacer es ponernos en contacto con el servicio de reparaciones de nuestra consola o atención al cliente. De este modo nos pueden proporcionar una solución como cambio de consola en el caso de que este en garantía o indicarnos donde podremos llevar nuestra consola a reparar.